En el caso de Pablo Márquez Lustig los criminales están presos, pero la justicia no aparece por ningún lado

*** Hace 3 años le asesinaron su hijo al ingeniero Pablo Márquez y a la fecha aún sigue reclamando justicia

*** Séneca  dijo que “Nada se parece tanto a la injusticia como la justicia tardía”

 

“Nada se parece tanto a la injusticia como la justicia tardía” reza la frase del antiguo filósofo, político, orador y escritor romano Lucio Anneo Séneca, que hoy usamos para graficar lo que ocurre con la justicia aragüeña, donde muchos jueces son extremadamente diligentes para procesar y encarcelar a jóvenes estudiantes que participan en las protestas contra el régimen y lentos, lerdos y corruptos para castigar a los delincuentes. Para el botón de muestra vamos a referirnos hoy a uno en concreto.

Veamos: El lunes 14 de abril de 2014, frente a la Clínica Guadalupe, en la calle Coromoto con la segunda transversal de la urbanización Calicanto de Maracay, unos hampones asesinaron a sangre fría a un aragüeño muy apreciado en la comunidad, el empresario Pablo Enrique Márquez Lustig, de 31 años de edad, hijo del honorable ingeniero Pablo Emilio Márquez Rondón. Poco más de tres años han transcurridos de ese fatídico y aún la justicia no aparece por ningún lado, a pesar de las múltiples y constantes gestiones que ha hecho y hace aún el desconsolado padre.

La historia del crimen

Pablo Enrique Márquez Lustig acudió ese lunes 14 de abril de 2014 a la mencionada clínica a realizarse unos exámenes preoperatorios. Cuando estaba siendo atendido, dos sujetos en sendas motos llegaron al lugar. Uno permaneció afuera mientras el otro entró, pidiéndole a Márquez que le entregara el bolso. No opuso ninguna resistencia alguna, como se logra ver en el vídeo de la cámara de seguridad. Sin embargo, el criminal le disparó a sangre fría. Cuatro proyectiles impactaron en la humanidad del joven y otros dos hirieron a dos mujeres, uno cerca de la cabeza y otro en la rodilla.

En junio de 2014, a casi tres meses del hecho, el entonces jefe del CICPC en Maracay, comisario Luis Ollarves, informó que “mediante un operativo envolvente, en el que participaron cerca de 40 funcionarios del Eje de Homicidios y del Bloque de Búsqueda del CICPC, Subdelegación Maracay, se logró la captura de uno de los responsables del asesinato del joven empresario Pablo Emilio Márquez Lutig, a quienes identificó como: José Gregorio Magallanes Romero, C.I 22.948.768, alias el mono. Además el jefe policial informó que los otros involucrados una vez cometido el crimen, los pistolero huyeron del sitio y a unos cuantos metros “El Mono” abordó un vehículo Hyundai Elantra de color marrón, placas AA8430V, conducido por Gustavo Darwin Magallanes Moncot (24), conocido como “el morocho”, mientras que Beiker José Ramírez Villarroel (21) alias “el Beiker”, se alejó conduciendo la moto. Para el momento, ese trío de sujetos aparecían incursos en otros actos delictivos, y a pesar de haber sido detenidos en varias oportunidades, la justicia nunca ha sido ni eficaz ni severa contra ellos, como suele suceder en muchos otros casos.

El caso es que octubre de ese mismo año 2014 cayó en manos policiales, frente al Palacio Municipal de Maracay Magallanes Moncot, alias el morocho, luego de atracar a una persona y despojarla de su celular y otras pertenencias. El ingeniero Márquez se enteró de esa detención e informó al Ministerio Público y a los tribunales que otro de los asesinos de su hijo estaba preso, pero no por el homicidio. Fue así como a pesar de salir airoso judicialmente en el proceso por la causa por la cual fue detenido, no pudo salir en libertad, porque aparecía dentro del proceso por el crimen de Pablo Enrique Márquez Lustig. Por esa fecha también se supo que el tercer participante en el crimen, Beiker José Ramírez Villarroel (21) alias “el Beiker”, cayó ultimado en un enfrentamiento con la policía.

Causas separadas

Actualmente las causas contra los asesinos de Pablo Enrique Márquez aparecen sorprendentemente separadas. En el Tribunal Cuarto de Juicio del Circuito Judicial Penal del Estado Aragua a cargo de la Juez Arlin Pérez Fonseca, la marcada con el número 4J-1782-14, aparece enjuiciado José Gregorio Magallanes Romero, C.I 22.948.768, alias el mono, apenas han convocado para la apertura de juicio, prevista para el 15/06/2017; mientras que la que cursa por ante el Tribunal Segundo en Función de Control del estado Aragua a cargo del recién nombrado juez Ruddy Caraballo, marcada con el numero 2C-35168-15, donde Gustavo Darwin Magallanes Moncot (a) “el morocho”, ni siquiera se ha producido la audiencia de presentación. Legalmente lo que corresponde a la

El Ing. Pablo Márquez Rondón, padre del joven asesinado, sigue cargando con su intenso dolor y reclamando Justicia

Fiscal del caso, en esta caso la 4ta, Zuly Álvarez, es solicitar la acumulación de esas causas, en pro de la celeridad, economía procesal y la mejor aplicación de la justicia.

Mientras todo esto ocurre así como lo hemos narrado, el Pablo Emilio Márquez Rondón, padre del joven asesinado, sigue cargando con su intenso dolor y desgastando las suelas de sus zapatos visitando el Ministerio Público y el Palacio de Justicia reclamando *¡JUSTICIA!* D-os lo permita.

 

José Rafael Ramírez
Periodista, CNP 3.141

 

Sé el primero en comentar en «En el caso de Pablo Márquez Lustig los criminales están presos, pero la justicia no aparece por ningún lado»

Dejar un comentario

A %d blogueros les gusta esto: